Cómo comprobar si la virtualización está activada en Windows 11: Guía paso a paso

Verificar si la virtualización está habilitada en Windows 11

Detectar si la virtualización está activa en un equipo con Windows 11 es bastante sencillo y puede ahorrarte dolores de cabeza en el futuro. Con esta pequeña revisión, sabrás si tu sistema es capaz de soportar máquinas virtuales o ciertos programas que requieren esa magia del hardware de virtualización. La forma más fácil de comprobarlo es usando las herramientas integradas, así que no hace falta meterse de inmediato en la configuración compleja del BIOS.

Abre el Administrador de tareas

Haz clic derecho en la barra de tareas; generalmente se abre un menú sin complicaciones. Selecciona “Administrador de tareas”. Si quieres ahorrar tiempo, simplemente presiona Ctrl + Shift + Esc para acceder directamente. El Administrador de tareas es como tu pase vip para ver qué está pasando en tu sistema: uso del CPU, memoria, y todo lo que hace que tu PC funcione.

Accede a la pestaña de Rendimiento

Una vez abierto el Administrador de tareas, haz clic en la pestaña “Rendimiento” en la parte superior. Aquí podrás ver una visión general del hardware, con gráficos y datos sobre CPU, memoria, disco, etc. Para verificar la virtualización, debes mirar la información en la sección de CPU.

Revisa los detalles del CPU

En la barra lateral izquierda, selecciona “CPU”. Esto filtrará la vista y mostrará exclusivamente las estadísticas de tu procesador. Aquí podrás ver la velocidad, el número de núcleos y, lo más importante, si la virtualización está activada o no.

Busca el estado de virtualización

Desplázate hacia abajo hasta que veas la línea “Virtualización“. Ahí te dirá claramente si está “Habilitada” o “Deshabilitada”. Si aparece “Habilitada“, ¡enhorabuena! Tu equipo ya puede correr entornos virtuales, útil si estás testeando software o trabajando en tareas empresariales.

Cierra el Administrador de tareas

Una vez revisado el estado, solo tienes que hacer clic en la “X” de la esquina para cerrarlo. Si indica que la virtualización está desactivada y necesitas que esté activada, será momento de ajustar la configuración en BIOS o UEFI. Ten en cuenta que通常 se requiere reiniciar el equipo y pulsar algunas teclas durante el arranque para ingresar a la configuración adecuada.

Consejos para asegurarte de que la virtualización está lista

Mantén Windows 11 actualizado; usar software desactualizado puede alterar las funciones de virtualización. El atajo Ctrl + Shift + Esc para abrir rápidamente el Administrador de tareas es muy práctico. Si tras la revisión la virtualización sigue desactivada, probablemente sea sencillo activarla desde el BIOS o UEFI en el arranque. Los teclas comunes para ingresar son F2, F10, Supr, o Esc. Busca opciones como Intel VT-x o AMD-V y actívalas. No olvides guardar los cambios antes de reiniciar.

Trucos y configuraciones desde la línea de comandos

¿Quieres comprobarlo desde el Símbolo del sistema o PowerShell? Puedes usar:

systeminfo | findstr /I "Hyper-V"

Get-CimInstance -ClassName Win32_Processor | Select-Object Name, SecondLevelAddressTranslationExtensions, VirtualizationFirmwareEnabled

si prefieres esos métodos.

Para activar Hyper-V (necesario para ciertas tareas de virtualización):
Ejecuta PowerShell como administrador y escribe:
```
Enable-WindowsOptionalFeature -Online -FeatureName Microsoft-Hyper-V -All
```
Después, solo necesitas reiniciar y listo.
Para explorar más a fondo las capacidades de tu CPU, abre Información del sistema presionando Win + R, escribe msinfo32 y pulsa Enter. Ahí podrás verificar si la virtualización está soportada y habilitada en los detalles del sistema.

Reflexiones finales sobre la configuración de virtualización

Saber si la virtualización está activa en Windows 11 no es solo una curiosidad técnica, sino una habilidad clave para quienes desarrollan software, prueban entornos virtuales o simplemente quieren experimentar con las capacidades de su equipo. El proceso es bastante sencillo porque usa herramientas que ya vienen con Windows. Si la virtualización está apagada, ingresar al BIOS suele ser fácil, aunque puede requerir algo de prueba y error con las teclas, dependiendo de tu hardware. Mantener Windows actualizado también ayuda a garantizar compatibilidad y buen rendimiento. Ya sea que quieras sumergirte en máquinas virtuales o simplemente tener curiosidad, aprender a verificar y activar la virtualización es una habilidad útil para tu caja de herramientas digital.